martes, 25 de septiembre de 2012

DEL SUJETO DEL PSICOANALISIS


 DEL SUJETO DE LA  CIENCIA Y LA TRANSMISION DEL PSICOANALISIS


“Si tenemos que introducir y muy necesariamente a nivel del psicoanálisis la función del acto, es en tanto que ese hacer psicoanalítico implica profundamente al sujeto. Ese sujeto en el psicoanálisis es puesto en acto”.
Jacques    Lacan

INTRODUCCION
        Este trabajo es producto de una investigación que vengo realizando desde hace ya tiempo respecto a ciertos sintagmas cristalizados que circulan dentro del psicoanálisis postlacaniano[1]. Algunos de ellos son, por ejemplo, “por la ley se engendra el deseo”(trabajado en el artículo “No todo es significante” publicado en Oxímoron N º 1 ),  “no hay sujeto en la psicosis”, “no hay falta en la psicosis”o “la ciencia forcluye al sujeto”. Plantear que dentro de la comunidad analítica existan sintagmas cristalizados, que son vehículos de ideología, es decir productos del sentido común psicoanalítico (léase psicológico), puede parecer una obviedad. Sin embargo cuando en una disciplina sistemática, como es el caso del psicoanálisis, se encuentran este tipo de frases hechas y se las repite en escritos de diferentes analistas, de una escuela o de otra; se la escucha en boca de postlacanianos haciendo ejercicio de transmisión en cursos y seminarios; o disertando en coloquios y congresos merece, por lo menos, una lectura de la situación del psicoanálisis. En este caso me refiero al postlacanismo porteño. Aunque el tema excede las fronteras regionales y nacionales. Convocado por esta situación decidí investigar sobre estos prejuicios(1) que se repiten con la fuerza de la opinión, generalmente acompañados de “Lacan dijo...”. Lo que quiero comunicar es el resultado de la investigación bibliográfica ( que continúa) realizada en torno a la tan mentada frase “la ciencia forcluye al sujeto”. Para lo cual se hace necesario aclarar que no se trata de una guerra de citas, de si Lacan dijo o no dijo...Se trata, en mi propuesta, de si se puede sostener racionalmente la aseveración antes mencionada(“la ciencia...). La conclusión, la anticipo, es que es imposible sostener, con argumentos, tal afirmación. A continuación intentaré demostrarlo.
DEL SUJETO Y DE LA SUBJETIVIDAD
1)   “El sujeto del psicoanálisis no evoluciona. ¿Qué quiere decir esto? Que el sujeto, efecto del acto analítico, cuando emerge no evoluciona simplemente porque no es el mismo. Es otro sujeto.”
2)   “El sujeto del psicoanálisis es un supuesto. Es decir un subjectum. De acuerdo con la etimología y la tradición medieval un sub-puesto es lo arrojado debajo como sostén supuesto de un juicio aseverado. Por lo tanto el que concluye-en el sentido de los tiempos lógicos- es el saber inconciente, no el sujeto, este último es incluido en tanto excluido por el saber que lo produce como su supuesto, en el sentido literal del vocablo."
3)   “Si este matema -$- está dividido por el significante, no es causa sui, no es agente, es un puro efecto, como la electricidad (efecto del movimiento de los electrones); sujeto: efecto del movimiento de los significantes. Entonces ¿cómo es posible que se escriba y se hable de sujeto deseante?.”
4)   “De la subjetividad quiero decir que es efecto de la construcción del fantasma. Entendiendo por subjetividad la articulación de RSI y de los empalmes entre lo simbólico de lo simbólico, lo simbólico de lo real y lo simbólico de lo imaginario; así como lo real de lo real, lo real de lo simbólico y lo real de lo imaginario; y lo imaginario de lo real, lo imaginario de lo simbólico y lo imaginario de lo imaginario. Esto es lo que da cuenta de la subjetividad, no el sujeto. El sujeto es asubjetivo. ¿Cuándo se construye esta subjetividad? Cuando el sujeto emerge como respuesta al Che Voi?; ¿Cuándo ocurre esto? Cuando se termina de construir el fantasma, es decir al finalizar el pasaje por el Edipo, incluyendo su reedición. ¿Qué implica la construcción del fantasma? Nada más, ni nada menos que “La condición humana”, tal como la registró Magritte”.
“Cuando se habla de lo subjetivo, e incluso cuando aquí lo cuestionamos, siempre permanece en la mente el espejismo de que lo subjetivo se opone a lo objetivo, que está del lado del que habla, y   que por lo mismo está del lado de las ilusiones: o porque deforma o porque contiene a lo objetivo. La dimensión hasta ahora eludida de la comprensión del freudismo, es que lo subjetivo no está del lado del que habla. Lo subjetivo es algo que encontramos en lo real.” (Lacan).
La noción de sujeto  es clave en la práctica del análisis. Operamos como analistas sobre el sujeto-$-. Sin embargo al decir sujeto hacemos Uno y este Uno deviene en prejuicio y entonces ocurre que confundimos y hacemos equivalentes sujeto- individuo- paciente. En definitiva le otorgamos una subjetividad al sujeto ($) y caemos en la “yocracia”con terminología lacaniana. La subjetividad, pensada en esta línea, se transforma en el bien más preciado, en un Ideal al cual debemos conducir al sujeto. De esta manera, es obvio, nos alejamos del psicoanálisis para tranformarlo en una “ortopedia humanitaria” que nada tiene que ver con el inconciente freudiano.                                                                                      
DEL SUJETO DE LA CIENCIA
Lacan plantea que el sujeto sobre el que opera el psicoanálisis es el sujeto de la ciencia, lo cito:  “Decir que el sujeto sobre el cual operamos  en el psicoanálisis  no puede ser sino el sujeto de la ciencia puede parecer paradojal.” Paradojal ¿por qué? ¿Acaso porque ciencia y psicoanálisis estarían enfrentados? En nuestros pagos parece que sí, y al viejo estilo del marxismo vernáculo con el capital “foráneo”. Es decir se ha constituido una suerte de ideología “ psicoanalítica humanística” que repitiendo la tan mentada frase “la ciencia forcluye al sujeto”, presenta al psicoanálisis como el lugar “Ideal”donde el pobre sujeto despedido por la ciencia, cual malvada inquisidora de la modernidad, encontraría a Aquel que prestaría su oreja para los padecimientos de nuestro antihéroe posmoderno.
        Sin embargo de lo que se trata,para Lacan, es de que la ciencia es una maniobra respecto de un saber: el saber científico. Este tiene ciertas características:
-No tiene memoria (olvida los dramas subjetivos de aquellos que contribuyeron a fundarla)
-No olvida nada (metodología, pasos)
-Es racional, matemático, comunicable, formulable.
-La verdad es tratada en términos de verdadero/falso. Opera con la noción de exactitud.
Su correlato antinómico: El sujeto en tanto dividido. Este:
-Tiene memoria (historia)
-Olvida
-Opera con la verdad (dinámica)
-Hay falta en lo simbólico.
Para Lacan la ciencia forcluye la verdad como causa, y opera sobre un sujeto que es el sujeto de los juegos de estrategia. Sus características:
-Sabe qué puede
-No olvida nada
-Sabe que quiere ganar (pero no sabe lo que quiere)
-Simbólico completo
Ahora bien ¿qué hace la ciencia con su correlato antinómico?
Intenta suturarlo, coserlo. De  dos hacer uno. ¿Cómo? Con dos maniobras:
a)   La lógica simbólica: 1)Hay universo de discurso.
    2)Tablas de verdad (vs verdad dinámica)
   3)Metalenguaje (hay Otro del Otro, hay garantía de la              verdad, Dios no engaña).
b)   La psicología: Toma al hombre como objeto de estudio. Anula la particularidad. Supone a todos iguales. Es un intento científico de suturar el efecto sujeto dividido.

¿Por qué es tan importante esta noción de sujeto de la ciencia? Porque es parte de lo que Lacan construyó, a mi entender, para hacer del psicoanálisis una disciplina racional, transmisible vs. un   psicoanálisis inefable, no comunicable (o sea para saber algo de esto hay que analizarse), salvo los rituales de iniciación. Porque no es lo mismo forcluir al sujeto que forcluir a la verdad como causa. Las consecuencias de forcluir la verdad como causa son las enunciadas más arriba. Las de forcluir al sujeto llevarían  a postular que Freud produjo un retorno en el seno de la ciencia y que ese retorno se llama sujeto y como consecuencia que el psicoanálisis es portador de una verdad última respecto al sujeto. Cuando el retorno que produjo Freud fue el de la verdad en el campo del saber. Una verdad que siempre es efecto de represión, la verdad en cuestión se llama castración. “ Esto significa operar con una verdad dinámica, que se juega en las palabras. En cómo una palabra se dice verdadera, cómo garantiza de sí misma que es verdadera. Debe para esto decir que no es mentirosa, lo mismo que hace toda palabra mentirosa.Esto quiere decir que no hay palabra que pueda evitar los efectos de la falta de verdad de la verdad. No hay garantía de la verdad. Esto es lo que forcluye la ciencia. Por eso su orden simbólico es completo, pues la inexistencia de la verdad de la verdad es la manera en que se registra  la incompletud del orden simbólico, la incompletud del Otro. Por eso para la ciencia Dios no juega a los dados con el mundo, o sea Dios no engaña.”  Para la neurosis todo el drama se juega aquí: el Otro engaña, no es completo y encima no existe. La maniobra neurótica consiste en darle consistencia al Otro, afirmar que existe, y el Otro del Otro también. Considero que de cómo se entiendan estas cuestiones deviene una u otra manera de operar en la clínica. Para  ser más estricto, en la función deseo del analista tanto en la intensión como en la extensión.
LECTURAS
El otro punto de mi trabajo partió de un interrogante:¿De dónde los postlacanianos han deducido, inferido o leído, que la ciencia forcluye al sujeto?
Realizando un exhaustivo relevamiento bibliográfico, encontré que quien por primera vez plantea esta cuestión es J.A. Miller en un viejo texto titulado “Acción de la estructura”(1964). Muchos años después en una de las conferencias, dictadas en Caracas, previas a la llegada de Lacan, editada luego como “Elementos de epistemología”, dentro del volumen titulado “Conferencias Caraqueñas”(2), lo dice con todas las letras. Sin duda merece un artículo aparte lo que implica en la historia del lacanismo esta lectura milleriana de Lacan, que comienza con el texto más arriba citado, y que se continúa con “La sutura”, texto que, casualmente, es  respondido por el mismo Lacan en la clase inaugural del seminario “El objeto del psicoanálisis”, y editado posteriormente en los “Escritos” como “Ciencia y Verdad”.
Sin embargo lo que interesa para responder a mi interrogante es que la lectura milleriana de Lacan, es mi hipótesis, se introdujo junto con el pensamiento del maestro francés en estas costas del Plata hacia mediados de los 60. Esta lectura  por lo tanto, está tanto en los orígenes de este sintagma cristalizado como en los comienzos de la transmisión del psicoanálisis lacaniano.

Entonces es posible conjeturaar que no es casual que quienes promueven esta lectura ideológica hayan sido en su momento ad- lateres de aquel aspirante a amo que supo sentarse correctamente a la sombra de ese verdadero amo que fue Lacan, y que hoy o forman parte de sus huestes  o están enfrentados especularmente con El yerno. 
Claudio R. Boyé
Psicoanalista









NOTAS
1)   Quien generó mi inquietud por este prejuicio fue Alfredo Eidelsztein, en la clase inaugural de su seminario “Las estructuras clínicas”.
2)   Dice Miller: “Lacan formula, lo cual puede parecerles  paradójico, que el sujeto del inconciente freudiano, ese sujeto que aparentemente es muy distinto de un cogito, es el sujeto de la ciencia, es el sujeto puntual y evanescente de Descartes. Aquí tenemos que distinguir dos cosas. En primer lugar, este sujeto de la ciencia que emerge con Descartes, al mismo tiempo que emerge es rechazado del discurso de la ciencia, es a la vez una de sus condiciones, pero una condición forcluida, rechazada al exterior, lo que hace que la ciencia se presente efectivamente como un discurso sin sujeto(...)sic.
BIBLIGRAFIA
Lacan,J.: “ Ciencia y verdad”.
            “Subversión del sujeto y dialéctica del deseo”. Escritos, Ed. S XXI.
            “El objeto del psicoanálisis”. Seminario inédito
“Radiofonía y televisión”. Ed. Anagrama.
Roudinesco,E.: “Lacan”. Ed. F.C.E.
Miller J.A.: “Matemas I y II”.Ed. Manantial.
Edelstein, A: Apuntes personales de clases.
Milner,J.C.: “Lacan, la obra clara”. Ed. Bordes.Manantial.
Ritvo,Juan B.: "El tiempo lógico y el aserto de certidumbre anticipada". Ed. Letra Viva.



[1] Al decir postlacanianos estoy equiparando el término con posfreudianos en el sentido evolutivo del mismo. Es decir aquellos que por ubicarse después en la diacronía se sienten obligados a hacer progresar un pensamiento, una teoría, por el mero hecho de que la evolución tiende a lo mejor. Olvidando que la evolución como tendiendo a lo mejor es un Ideal, y que el Ideal es esclavo de la sociedad.

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